Físicas y virtuales, con servicios exclusivos y seguro de viaje incluido
Supervisa y configura cada tarjeta con total seguridad y en un solo clic
Ventajas exclusivas, límites ampliados, tecnología 3D-Secure
Múltiples formas de pago para cubrir todas tus necesidades
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En pocos clics podrás añadir recibos digitales y en papel, introducir datos y solicitar tickets. Gestiona rápidamente tus tareas administrativas diarias, evitando errores manuales y transacciones que no se justifican.
Sincroniza datos con hasta 80 programas distintos de contabilidad, evitando las continuas importaciones y exportaciones de archivos. Siempre a través de la conexión segura que te ofrece el open banking y previo consentimiento en el caso de realizar operaciones sensibles.
Abrir tu cuenta online solo te llevará 10 minutos. Si eres autónomo o formas parte de una pyme tienes una cuenta de empresa con todas las prestaciones y acceso 24 horas desde cualquier parte del mundo.
Aunque ambas sirven para realizar pagos con dinero no físico, las tarjetas de débito llevan establecidos unos límites mensuales y descuentan de forma automática el dinero utilizado de la cuenta bancaria a la que están asociadas. Con las tarjetas de crédito en cambio no se descuenta el dinero hasta pasado el mes en el que se ha realizado la transacción.
Por otra parte, el uso de las tarjetas de crédito suele llevar asociados ciertos intereses, por lo que inevitablemente se encarecerán los gastos que realicemos con esta forma de pago. Por este motivo, y para conseguir un mayor control de las transacciones realizadas, en las cuentas de empresa las tarjetas de débito suelen ser la opción preferida frente a las tarjetas de crédito.
Para un control total de las transacciones que se realicen en una tarjeta de débito se podrán establecer límites mensuales, tanto en pagos como en retiradas de efectivo en cajeros. Estos límites suelen venir establecidos por la entidad bancaria, pero siempre pueden ajustarse fácilmente desde una web o app móvil, especialmente en el caso de disponer de una cuenta online.
De esta forma siempre podrás establecer un control sobre las operaciones realizadas con tus tarjetas de débito, a la vez que disfrutas de cierta flexibilidad, ajustando límites según tus necesidades en tiempo real.
Si necesitas realizar pagos y compras online, las tarjetas virtuales son la alternativa ideal a los métodos de pago más tradicionales, incluidas las transacciones bancarias.
Este tipo de tarjetas ofrecen una seguridad total en internet, tanto si son tarjetas de prepago en las que se recarga una cantidad determinada como si lo son de débito, quedando vinculadas a una cuenta corriente en concreto.
El sistema 3D-Secure es un sistema de seguridad presente en las tarjetas que se utilizan para realizar pagos online, tanto físicas como virtuales, que tiene como finalidad evitar los fraudes en compras por internet.
Consiste en la verificación del titular y la confirmación del pago en 3 pasos. Además de añadir los datos de la tarjeta que vamos a utilizar para el pago online, también será necesario añadir un código adicional, que puede ser un PIN o una clave enviada mediante SMS, entre otros métodos.