Cuota de autónomo y tarifa plana: ¿en qué consisten?

El pago de la cuota de autónomos es un trámite obligatorio que para muchos nuevos emprendedores supone un quebradero de cabeza. 

Se trata de una cuantía que no solo varía anualmente según los Presupuestos Generales del Estado, si no que también dependerá de la base de cotización que elijas tras haber realizado una estimación de los beneficios que crees que vas a tener desempeñando tu actividad profesional. 

Puesto que son varios los factores a tener en cuenta, y sobre todo, por tratarse de uno de los primeros trámites a los que enfrentarse en el alta como autónomo, lo más frecuente es recurrir a una asesoría online para autónomos que pueda aportar su experiencia y encargarse de completar por ti este proceso. 

En todo caso, vamos a contarte todo lo que debes saber sobre la cuota de autónomos y cómo puedes reducir esta cantidad mensual a pagar. 

¿Qué es la cuota de autónomos?

La cuota de autónomos consiste en el pago mensual que como trabajadores por cuenta propia realizamos a la Seguridad Social. Esta cuota es obligatoria y se realiza desde el momento en que nos damos de alta en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos). 

En otras palabras, esta cuota es el equivalente al porcentaje descontado en el salario mensual en el caso de los trabajadores por cuenta ajena, y que se destina a cotizar en la Seguridad Social.

La diferencia principal con estos trabajadores por cuenta ajena es que los autónomos deben realizar el pago de esta cuota mediante domiciliación bancaria, además de poder elegir la base de cotización que determine la cuota a pagar. Y este pago, por supuesto, es obligatorio, ya que de lo contrario podrías ser sancionado, además de tener que pagar todas las cuotas atrasadas desde el inicio de tu actividad laboral.

¿Qué incluye la cuota de autónomos?

Mediante el pago de esta cuota de autónomos, los trabajadores por cuenta propia se aseguran una serie de coberturas y prestaciones a las que tienen derecho, que serían las siguientes:

• • Contingencias comunes: tales como asistencia médica, prestaciones por incapacidad laboral, baja por maternidad o paternidad, viudedad, orfandad, etc.
  • Contingencias profesionales: en caso de sufrir un accidente laboral o una enfermedad derivada de nuestra actividad profesional.
  • Por cese de actividad: lo equivalente a la prestación por desempleo de los trabajadores generales, aunque se rige por otros aspectos específicos al sector.

Por otra parte, la cuota que pagues determinará también la cuantía de tu futura pensión de jubilación como autónomo, por lo que es un factor también a tener en cuenta a la hora de elegir la base de cotización a pagar.

¿Cómo se calcula la cuota de autónomos?

La cuota de autónomos dependerá de la base de cotización que elijas de entre las fijadas anualmente en los Presupuestos Generales del Estado. A partir de aquí, se te aplicará un porcentaje en base a esta cotización, que será lo que vayas a pagar de cuota.

Pero, ¿cómo elegir correctamente qué cuota de autónomos pagar? Esto dependerá en todo caso de tu situación y de los beneficios que estimas que vas a obtener por realizar tu trabajo.

Si bien la gran mayoría de emprendedores optan por pagar la cuota mínima, especialmente al inicio de su actividad, es posible que en un futuro prefieras pasar a pagar una cuota de autónomos más alta, para obtener así mayores prestaciones y pensar en una jubilación más cómoda.

Podrás cambiar de base de cotización en cualquier momento, pero ten en cuenta que solo se permiten un máximo de 4 modificaciones al año. Es por esto que, en caso de no tenerlo muy claro, te recomendamos contar con la ayuda de expertos que puedan aconsejarte, además de informarte de bonificaciones que puedan aligerar tus cargas económicas, como es el caso de la tarifa plana para nuevos autónomos, de la que te hablamos a continuación.

¿En qué consiste la tarifa plana para nuevos autónomos?

Existe un tipo de bonificación para nuevos autónomos, conocida como tarifa plana o cuota de los 60 euros, y que reduce a mínimos la cuota que debemos pagar a la Seguridad Social. Esta medida se introdujo en 2013 con el fin de fomentar el autoempleo y ayudar a los nuevos emprendedores que decidían empezar a trabajar por su cuenta.

Lo que permite esta tarifa plana es establecer el pago de la cuota de autónomos a 60 euros durante un período de tiempo, frente a los 286,15 euros de mínimo fijados en 2020. Y aunque originalmente se limitaba a aquellos nuevos emprendedores menores de 30 años, en la actualidad no existe un máximo de edad para solicitarla.

En caso de solicitar esta tarifa plana para nuevos autónomos, tendríamos varios tramos de bonificación:

• • Durante los 12 primeros meses: pagaríamos 60 euros por la base de cotización mínima.
  • Entre los meses 13 y 18: la cuota mínima se reduce al 50%, pagando 141,45 euros mensuales.
  • Entre los meses 19 y 24: la cuota mínima se quedaría en un 30% menos, o lo que es lo mismo, en 198,31 euros al mes.
  • De los meses 25 al 36: la reducción del 30% en la cuota mínima se mantendría en el caso de ser autónomo menor de 30 años o autónoma menor de 35, manteniendo estos 198,31 euros mensuales.

¿Cómo solicitar la bonificación de la cuota de autónomos?

Podrán acogerse a este tipo de bonificación en la cuota todos aquellos nuevos autónomos que cumplan con los siguientes requisitos:

• • No haber sido autónomo en los dos últimos años
  • No ser autónomo colaborador
  • No ser administrador en una sociedad 

En caso de que te encuentres en alguna de estas situaciones, podrás beneficiarte de la tarifa plana para autónomos solicitándola en la Seguridad Social, en el mismo momento en que solicitas el alta en el RETA. 

Por supuesto, cada caso es un mundo. Mientras que unos autónomos preferirán optar por la cuota mínima y acogerse a este tipo de bonificación, para otros puede que no sea posible, o prefieran elegir una base de cotización más alta y con ello pagar una cuota mayor con el fin de obtener así mayores y mejores prestaciones por el desarrollo de su actividad.

Para poder arrancar bien un negocio es indispensable confiar en un asesor con años de experiencia, que pueda llevar tu caso de manera individual y teniendo en cuenta cada detalle de tu proyecto y situación personal.